Psicodelía extraña y curiosa

Buenas, gentes :)

Hoy inaguro artes escénicas como apartado. En él, iré recuperando algunos bonitos experimentos y experiencias pasadas y presentes en danza, música y teatro.

A continuación una muestra de un taller de improvisación musical. La improvisación como tal es un terreno que me fascina por la energía creativa del instante, la espontaneidad, y el acercamiento a la expresión real de cada uno desde el vacío.

Pienso que para poder deslizarse de un modo creativo en el arte y la vida, es fundamental dedicar nuestra concentración al momento presente. Es el mítico y manido "Carpe Diem", pero no entendido como búsqueda de placer inmediato, sino como forma de estar con lo que profundamente somos y conectados con lo que hay en el  momento presente. Conectar el individuo con el mundo, lo interno con lo externo. 

El éxito en esta experimentación deviene en el fluir, que todos hemos experimentado alguna vez. Y este no es más de un abandono de aquellas actitudes rígidas y patrones de conducta perconcevidos, para dar lugar a un comportamiento más vital y auténtico de nosotros. Es cuando podemos decir, valga la redundancia, que de verdad "estamos presentes". Hay un tipo que se ha dedicado a estudiar este fenómeno, entrevistado por el siempre entrañable Punset, para aquellos que necesiten de la ciencia y por sólo mencionar su complicado nombre: Mihály Csíkszentmihályi

Filosofías a parte, la improvisación, en este caso musical, es divertidísima. El taller trataba de ir probando e investigando un montón de instrumentos de viento, percusión y cuerda de diferentes lugares del mundo y dejarse llevar por lo que cada uno quería contar desde lo inmediato ya fuese solo o acompañado.

El audio de abajo es una muestra de una de las composicíones de los que participamos en el taller, músicos y gente sin experiencia musical de ningún tipo. La pieza comenzó con un Hang que tocamos a 4 manos, un raro instrumento que tiene forma de platillo volante (el de la imagen). Tiene un tacto además muy suave, por lo que la experiencia de tocarlo es muy placentera. Despúes se fueron uniendo voces y otros instrumentos. Ahí va:

Seguro que durante la audición os habéis imaginado un montón de colgaos bailando descalzos, tipo "Hare Krisna". Ppssi... un poco el rollo. Pero, ¿a que da buena onda y os han entrado ganas de acompañar con la mesa del despacho, soltar la voz, o chocar el anillo con la taza de café? ;)

Bonita tarde!